martes, diciembre 12, 2006

papá noel son los padres


"...y 2 son 10. Muchas gracias", me dijo. A lo que respondí: "Gracias a usted". Y si ahí hubiera terminado la conversación hubiera sido un perfecto y rutinario viaje en taxi. Pero no. Tuvo que decir esa última palabra sólo para complicarme el día. La dijo con la única intención de molestarme, de desviar a otro objetivo toda la furia que me provoca el calor. Y lo hizo sin ningún remordimiento. Lo vi en sus ojos. Es más, si le hubiera hecho saber que era el primero que me lo decía se hubiera vanagloriado de tal acto con sus colegas en algún cafecito tomado a las apuradas en una estación de gas. Pero no. No se lo dije. Ni siquiera le respondí. Aunque muy por adentro pensé: "Ojalá se te quede sin hojas el árbol de levas". Decí que no me acuerdo quién sos sino te rayaba todo el taxi con una moneda. A ustedes les parece? Cómo me va a decir "Felicidades!"? Acaso no sabe que no armo el arbolito?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Para de deformar las fotos enfermo!!!
Mañana llamo a Natalia.