
Y pensar que dicen por ahí que dando vueltas en círculo no se llega a ningún lado.

Sé que las probabilidades de que haya algún lector que aún visite este blog son menores que la probabilidad de que en esta ciudad nieve cada invierno. No obstante eso, una noticia de reciente aparición en los medios locales me ha llevado a romper el silencio bloguístico: la iglesia católica ha decidido abolir el limbo. Así como lo leen. Al igual que en algunos videojuegos, de hoy en adelante se podrá pasar al siguiente nivel sin necesidad de matar al bicho más grande y resistente a los tiros. En 41 páginas una comisión de 30 personas se pronunció en forma de decreto eliminando el limbo de un plumazo. El documento dice en una de sus partes "la misericordia de dios quiere que todos los seres humanos sean salvados". Sólo me resta demostrar que entro en la categoría de ser humano para poder dormir tranquilo el resto de mis noches.